viernes, 18 de enero de 2019

Se aproximan un eclipse lunar total, una superluna y una luna de sangre simultáneos.
Fuente AP 18/01/2019
La Luna, la Tierra y el Sol se alinearán el fin de semana, el único eclipse lunar total de este año y el próximo. Al mismo tiempo, la Luna estará más cerca de la Tierra y se verá ligeramente más grande y luminosa de lo usual: una superluna.
“Este estará especialmente bueno”, dijo Patrick Hartigan, astrofísico de la Universidad Rice. “No solo es una superluna y un eclipse total, sino que el eclipse total también dura bastante. Alrededor de una hora”.
El eclipse comenzará el domingo por la noche o el lunes en la madrugada, según el lugar y durará unas tres horas.
Comenzará con la fase parcial alrededor de las 10:34 de la noche del domingo, tiempo del Este de Estados Unidos (0334 GMT). Es entonces cuando la sombra de la Tierra comenzará a encimarse sobre su satélite natural.
El eclipse total _cuando la sombra de la Tierra cubra completamente a la Luna_ durará 62 minutos, a partir de las 11:41 de la noche, tiempo del Este (0441 GMT).
Si los cielos están despejados, el fenómeno podrá apreciarse en Sudamérica y Norteamérica, incluida Groenlandia, así como en Islandia, Irlanda, Gran Bretaña, Noruega, Suecia, Portugal y las costas de Francia y España. En el resto de Europa, así como en África, se podrá ver parcialmente antes de que la Luna se ponga.
A la hora del eclipse total, la Luna se verá rojiza debido a la luz solar reflejada en la atmósfera terrestre. Es por eso que en ocasiones a un eclipse de Luna se le llama luna de sangre.
“Lo bueno es que uno no requiere ningún equipo especial para verlo”, afirmó Hartigan.
En Asia, Australia y Nueva Zelanda no se verá el eclipse.
El siguiente eclipse lunar total ocurrirá en mayo de 2021.
Presentan al Vaticano dossier de Presunto Milagro de Jose Gregorio Hernandez
El cardenal Giovanni Angelo Becciu, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos, del Vaticano, recibió el mediodía de este viernes el expediente  del presunto milagro a la niña Yaxury Solorzano Ortega, de 12 años, hace 22 meses, en San Fernando de Apure, que podría llevar a la tan esperada declaración como beato del médico trujillano José Gregorio Hernández.
El dossier fue entregado a monseñor Giacomo Pappalardo, canciller del referido dicasterio, por el cardenal Baltazar Porras,  como administrador apostólico de Caracas y  en representación de la Iglesia venezolana, junto con la nueva postuladora de la causa de beatificación del Venerable desde el pasado diciembre, la abogada argentino italiana Silvia Correale.
Les acompañó  el sacerdote y abogado canónico caraqueño Gerardino Barracchini, párroco de San Rafael, de La Florida, y vicario episcopal por la Santidad de la arquidiócesis de Caracas, quien fungió como promotor de justicia en el tribunal esclesiástico que estudió el caso de la menor guariqueña que habría sido supuestamente sanada por el llamado médico de los pobres el 10 de marzo de 2017 tras quedar gravemente herida por un balazo en la cabeza que recibió en  el caserío Mangas Coveras, del estado Guárico, donde reside por parte de unos delincuentes.
“El hecho fue calificado como inexplicable por el tribunal cuando una tomografía realizada el pasado diciembre,  ordenada por el tribunal, mostró que la niña tiene la lesión en el cerebro pero se encuentra totalmente asintomática , sin secuelas, cuando  —21 meses después de haber recibido el balazo, ahora con 12 años— debía presentar discapacidad, según el pronóstico del neurocirujano”, agregó el informante.
Inicia así la llamada fase romana de la instrucción del presunto milagro, a la espera de la emisión del decreto de validez jurídica de parte de la Congregación para las Causa de los Santos, “después de verificar que cumple con las normas vigentes de la instrucción vaticana del presunto milagro”, precisó una fuente eclesial a PANORAMA.
En caso de ser emitido el mencionado decreto, le corresponderá a la postuladora Correale elaborar el sumario del expediente para ser presentado antes todos los participantes de los tres congresos que tendrán a cargo su análisis para luego, en caso de ser aprobado,  ser presentado para el visto bueno final del papa Francisco.
Médicos de todas las especialidades designados por el Papa recibirán información del dossier por parte de un relator, en una fecha fijada por la Congregación para la Causa de los Santos, según su calendario.  Tras el exhaustivo estudio del caso deben concluir por mayoría, con votos a favor, en contra o dubitativos,  que el presunto milagro por su intercesión a la niña Yaxury  es un hecho inexplicable por las ciencias médicas.
El expediente del Venerable pasará luego al congreso de teólogos si los médicos aprueban el presunto milagro. Les corresponderá determinar si realmente se dio la intercesión del doctor Hernández por la súplica hecha por la madre de la menor.  Ellos abjudicarían el hecho inexplicable al Venerable trujillano.
Reconfirmar la decisión de médicos y teólogos de que se trata de un verdadero milagro de Hernández sería la tarea del Congreso de cardenales y obispos.
Finalmente, el prefecto del dicasterio pediría audiencia al papa Francisco para informarle de los resultados de los congresos, y solicitarle apruebe y ordene el decreto de beatificación, que tendría efecto una vez publicado en  L'Osservatore Romano.

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